Empoderar a la comunidad sorda sobre sus derechos, exigiendo el cumplimiento de la regualación que la ley estipula, es el objetivo del convenio de colaboración firmado entre Fundación Pro Bono y Deaf We Can.
Deaf We Can es una organización estadounidense sin fines de lucro que trabaja con personas sordas en países en desarrollo para ayudarles a defender sus derechos humanos básicos. Su director ejecutivo es Michael Steven Stein, es abogado de sordos y socio del estudio Stein y Vargas, LLP y litiga casos de discriminación por discapacidad en los Estados Unidos.
El convenio establece como primeras líneas de trabajo el cumplimiento de los derechos de las personas con discapacidad auditiva, específicamente, en torno a la obtención de licencias de conducir y a la normativa que ordena la incorporación de lengua de señas y closed caption en la programación de la televisión nacional. Este proyecto será ejecutado por la Fundación y financiado por la entidad estadounidense.