Fundación Pro Bono lleva su Programa de Educación Cívica a Temuco para fortalecer la formación ciudadana

Abogados voluntarios de los estudios jurídicos Guerrero Olivos y Prieto Abogados realizaron talleres a estudiantes de 5º y 6º básico de la Escuela Manuel Recabarren, en la Región de La Araucanía, como parte de una iniciativa que busca descentralizar el acceso a la educación legal.

En el marco de su pilar de Educación Legal, Fundación Pro Bono continúa llevando a cabo una serie de talleres en establecimientos educacionales de regiones. Esta vez fue en la Escuela Manuel Recabarren, ubicada en el sector Amanecer de Temuco, que durante el mes de septiembre, recibió a los abogados en búsqueda de entregar los conocimientos básicos y herramientas para comprender su rol como futuros ciudadanos, sus derechos y deberes.

Durante cuatro intensas jornadas, en donde se realizaron talleres a alumnos de 5to y 9vo básico, un equipo de abogados voluntarios compartió sus conocimientos y experiencias con los alumnos sobre los conceptos básicos de democracia. La delegación estuvo compuesta por María Paz Ramírez y Teressa Trucco del estudio Guerrero Olivos, y por Juan Pablo Correa y José Tomás Veas de Prieto Abogados, quienes fueron acompañados por la coordinadora del Programa de Educación Cívica de la Fundación, Daniela Miranda.

La visita fue especialmente valorada por la comunidad educativa del establecimiento. Óscar Silva, director de la Escuela Manuel Recabarren, destacó el valor de la iniciativa, señalando que «es primera vez que tenemos apoyo de esta índole». Agregó que «es importante la educación cívica, usted sabe que hace rato desapareció de los centros educativos y hoy día tener esta instancia se agradece, porque los estudiantes tienen la posibilidad de acceder a las personas que manejan estos contenidos».

Esta percepción fue compartida por Benjamín Salazar, Jefe Técnico de la establecimiento, quien enfatizó el impacto a largo plazo de estos talleres. «La importancia de estas charlas para los niños es que ellos entiendan que hay temas que hay que abordar, que quizás hoy se vean pequeños, pero que más adelante se transforman en responsabilidades, deberes y derechos que van a tener que hacer valer, y tienen que tener conocimiento de eso», afirmó.La experiencia fue igualmente enriquecedora para los profesionales voluntarios, quienes lograron una gran conexión con los estudiantes. Juan Pablo Correa, abogado de Prieto Abogados, describió la actividad como «una experiencia muy gratificante. No solamente ellos aprendieron, nosotros también aprendimos mucho de los niños, niñas y adolescentes». Sobre la metodología, explicó: «Mediante actividades de participación, logramos hacer una clase muy dinámica, en donde quedaron con los conceptos claves de lo que es la democracia»